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Una Navidad Emocionalmente Competente




Aunque cualquier momento es bueno para desarrollarnos emocionalmente, la Navidad es una época totalmente oportuna.

Con esta intención ponemos a vuestra disposición una guía que propone la vivencia de las fechas más señaladas como punto de partida para trabajar nuestras competencias emocionales.


El viaje propone recorrer las 5 líneas de nuestro recorrido y detenernos en cada una de ellas para reflexionar y poner en marcha algunos de los recursos que nos brinda la Educación Emocional.


A través de la Línea 1: FIESTAS DE NAVIDAD, os proponemos un recurso de Conciencia Emocional.

A través de la Línea 2: NOCHEBUENA, os proponemos un recurso de Competencia Social.

A través de la Línea 3: 25 DE DICIEMBRE, os proponemos un recurso de Regulación Emocional.

A través de la Línea 4: NOCHEVIEJA, os proponemos un recurso de Competencias para la Vida y el Bienestar.

A través de la Línea 5: REYES, os proponemos un recurso de Autonomía Emocional.




Línea 1: FIESTAS DE NAVIDAD


Si bien las emociones nos acompañan siempre a todas partes, la vivencia emocional de la Navidad es única, intensa y variada. La ilusión de los más pequeños, el amor y la comunión de reencontrarnos con nuestros seres queridos, la tristeza por aquellos que ya no nos acompañan, las sorpresas, el disfrute de las comidas, la gratitud y el privilegio de tener tanto en comparación con aquellos que tienen tan poco, los nervios de la noche de Reyes...

En definitiva, una época perfecta para poner en marcha nuestra capacidad para tomar conciencia de nuestras emociones y de las personas que nos rodean.

A continuación encontraréis un calendario emocional para que podáis tomar conciencia del color emocional de vuestra Navidad.


1- Asignad un color a cada emoción y añadid aquellas emociones, sentimientos o estados de ánimo que queréis que aparezcan en vuestro calendario emocional.

2- Cada día buscad un momento de calma. Deteneros, respirad y conectad con vuestro interior, de manera íntima y honesta. Intentad repasar el día y reflexionar sobre las emociones que habéis experimentado. A continuación escoged aquella que más representa vuestro día y pintad el círculo del color que tenéis asignado a la emoción escogida.

3- A continuación podéis haceros las siguientes preguntes:

¿Cuáles han sido los motivos de mis emociones? ¿Por qué me he sentido así hoy?

¿Cómo me gustaría sentirme mañana? ¿Qué puedo hacer mañana para sentirme tal y como deseo sentirme?





En el próximo post, recorreremos la Línea 2: NOCHEBUENA

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